Censura

Hoy quiero protestar por la censura, pero primero nos debemos preguntar qué es. Según una definición de la RAE, la censura es una nota, corrección o reprobación de algo. Es decir, una intervención por la que una obra original es modificada o incluso eliminada. Esta práctica era muy utilizada por la Santa Inquisición con el fin de controlar el corriente ideológico (ejemplo: la quema de brujas aseguraba un control sobre las mujeres que serían ejecutadas si se mostraban contrarias al régimen).

Más adelante, la censura ha sido utilizada como un arma fundamental en los gobiernos totalitarios, tal como hicieron Hitler, Franco y Stalin. Ocultando información o modificándola y quitando de en medio (eliminando o desprestigiando) a aquellos contrarios a sus ideales políticos se conseguía engañar casi con totalidad al pueblo y se le imponían las ideas deseadas.

Cuántas pinturas habrán sido quemadas o retocadas (como "el juicio final" de Miguel Ángel en la capilla sixtina en el cual todos los personajes aparecían desnudos y gracias a un Cardenal, el artista se vio obligado a pintar lienzos sobre su obra), cuántos libros habrán acabado en la hoguera (como la gran biblioteca de Alejandria) o ocultados ante el mundo (el libro más vendido de la historia, la biblia, es una selección de otros 12 libros que siguen siendo un misterio del que sólo el Papa puede tener acceso).

Hoy en día, vivimos ligados a los medios de comunicación. Querer conocer la actualidad del mundo entero es algo tan sencillo como leer el periódico, mirar un noticiero televisivo, escuchar la radio o buscando en Internet. Y aquí es el primer punto de mi crítica. Una misma noticia se nos puede ofrecer de varias formas y es algo tan fácil como compararla entre varios noticiarios, pero ¿cómo pueden modificar una misma noticia?. La palabra a veces es más poderosa de lo que podrá ser jamás un puño (Nach, Interludio)y haciendo uso del lenguaje y de sus adjetivos calificativos puedes engrandecer o empequeñecer una manifestación. Ejemplo: "Una gran concentración de más de 1000 personas" puede verse mermado ante "Una pequeña manifestación de apenas 1000 personas". Así, el partido del Madrid 3-1 Osasuna (18-01-2009), caracterizado por la mala arbitración que, de haber sido correcta, hubiese supuesto la derrota del equipo merengue fue "Madrid gana sufriendo" o "Remontada con polémica".
De esta misma forma, se pueden utilizar adjetivos descalificativos para perjudicar la imagen de aquél que, según el autor de la noticia, no merece su respeto: Jackie Chan puede pasar de ser insufrible a una estrella de las artes marciales. Ejemplos como estos los podemos encontrar a diario y esto nos demuestra que no estamos libres de la censura ni de la subjetividad.

También podemos encontrar censura en el cine. La famosa escena de Kill Bill vol.1 (Tarantino, 2004) en que Uma se enfrenta a los 88 maníacos en que se torna monocromática se sucedió así porqué podría haberse visto dañada la sensibilidad de los espectadores causada por una sobredosis de sangre roja. En la primera Spiderman (Sam Raimi, 2002) se censuró, para no herir sentimientos, una escena en que el superhéroe arácnido atrapava un helicóptero tejiendo una red enorme entre las desaparecidas Torres Gemelas al igual que el final de Men In Black 2 (Barry Sonenfield, 2002) en que se debía desarrollar en la cima las torres. O en la versión extendida de Hancock (Peter Berg, 2008) en que hay una escena cómica añadida sobre sexo que fue censurada en su versión cinematográfica.

Aquí nos lleva a pensar que en la actualidad, el mayor censurador fílmico del mundo es Estados Unidos. Y esto se demuestra con total claridad con muchas obras asiáticas que llegan a nuestras pantallas a través de los EUA. De este modo, filmes de Jackie Chan (cito estos porque los he podido comprobar) como "Who Am I?"(Benny Chan, 2001) o "El Poder Del Talismán" (Gordon Chan, 2003) en qué películas de unas 2 horas han pasado a durar hora y media, a base de tijerazo al metraje convirtiendo películas de entretenimiento en películas prácticamente incomprensibles (es como si te saltaras un paso entre la introducción y el desenlace). Y también podemos encontrar el mismo problema en las antiguas películas de animación de Dragon Ball, como una escena que encontré recientemente en que los pequeños de la serie debían enfrentarse a Hitler. Y no solo acabamos tragándonos un infumable metraje, si no que también acabamos siendo víctimas de un pésimo doblaje (como ocurre en el 99'9% del doblaje de Anime al Castellano).

En el mundo de la música también podemos encontrarnos con el caso de artistas que por declarar en contra de la SGAE se han visto obligados a retirar las acusaciones bajo la amenaza de la retirada de sus discos en el mercado. O también, el caso de Nach, que no acusó a la campaña del condón de plagio, sino que les acusó de insultar al movimiento del HipHop y para desvincularse de la campaña (que no dijeran que el había escrito la canción), pero contra el ministerio no puedes decir nada, desacreditaron al MC alicantino y acusándole de injurias se vio obligado a retirar las acusaciones. [Más...]

En referencia al Ministerio nos lleva a pensar en el actual gobierno, el cual es artífice de un bestial ocultismo (Crisis, Bolonia...). Recuerdo la gran noticia de los pisos de 30metros cuadrados, que puso en auge la crítica española, la cual consiguieron desviar hábilmente con el famoso tema de las bodas homosexuales. Podría seguir, pero iré acabando.

Por último podría hablar de la televisión, en que el método de censura se realiza de la forma más estúpida posible. Tele5 es claro ejemplo de ello, en que la mejor manera de no decir nada constructivo es emitir mierda que la gente traga y aplaude. Un insulto a la inteligencia humana como el fenómeno fan, en que se idiotiza a los espectadores. Podría citar algún ejemplo de programas, pero tanto Tele5 como Antena3 son las mecas de la tele basura, por desgracia, seguidas por un largo etcétera.

¿Queréis pensar por vosotros mismos o preferís que os den pan y os llamen tontos mientras se ríen en vuestra cara?.

a cuidarse,
*éRiC**KiLLeRe*